Para tener tu nueva casa sostenible, su diseño debe afrontarse desde las fases iniciales con una visión lo más integral posible
Una casa sostenible no es que tu arquitecto añada un par de frases bonitas en la documentación de tu proyecto, contar con paneles fotovoltaicos o que durante las reuniones comentaseis un par de veces la orientación de tu vivienda.
Para que tu nueva casa atienda a criterios de sostenibilidad, debe integrar desde su diseño todos los factores relevantes. Y para ello, debemos recopilar información (urbanística, meteorológica, topográfica, hábitos de los futuros usuarios, etc), estudiarla minuciosamente, tomar decisiones de diseño... y en la medida de lo posible, validar que las decisiones van en la dirección adecuada a través de análisis y simulaciones.
¿Quiere esto decir que una vivienda existente en la que no se consideraron todos estos conceptos durante su diseño no puede ser sostenible? No, más bien todo lo contrario. Si quieres reformar un edificio existente y convertirlo en una casa sostenible, conseguirás incrementar la vida útil del edificio; y además, adaptar su diseño para que incorpore estrategias activas y pasivas de eficiencia energética. Este tema lo trataremos en un post independiente; ya que consideramos que es crucial adaptar los edificios existentes a los estándares de eficiencia, salubridad y confort a los que aspiramos hoy en día.
En Datum, tenemos un sistema de trabajo que estructuramos en cinco fases y que aplicamos a las obras nuevas que abordamos:
1. Estudio de la parcela y los condicionantes que marcarán las decisiones para conseguir una casa sostenible
Normativa de aplicación y afecciones
Uno de los factores más determinantes en la configuración de tu casa sostenible. Su situación dentro de la parcela y las primeras decisiones de diseño vienen determinadas por la normativa urbanística que afecta a tu parcela. Estos requerimientos son muy variados: pueden ir desde la obligatoriedad de contar con un tipo de cubierta determinado o la regulación de los colores de tu fachada, hasta que te condicionen el ajardinamiento exterior.
Por ejemplo, tienes apalabrada una parcela preciosa pero no reparaste en que ese pequeño surco en una esquina es en realidad un curso de agua; y resulta que debido a normativas sectoriales, te prohiben construir ese maravilloso porche con el que pensabas sombrear tu vivienda.
Como ves, los factores que influyen en tu parecela pueden llegar a ser de lo más insospechado. Para minimizar el peligro que acecha bajo la apacible apariencia de tranquilidad, es recomendable el consejo de un técnico desde las fases iniciales.
Pendiente y topografía del terreno
Considerar tanto la pendiente como la topografía es importante para comenzar a definir el volumen de tu casa. Así controlaremos que los accesos y los movimientos de tierras sean lo más racionales posible.
Según cómo afrontemos estas actuaciones podemos ahorrar dinero, contener el futuro consumo energético e intervenir en el paisaje de una manera respetuosa.
Orientación y soleamiento
Para maximizar la captación de radiación solar, y que esta sea de una manera controlada según la distribución interior de tu casa, debemos analizar la orientación y la radiación solar de tu parcela desde los primeros estudios de volumen de tu vivienda.
Me he encontrado con casos en los que personas que aspiraban a construirse una casa sostenible y eficiente energéticamente no tuvieron ningún tipo de asesoramiento en este sentido; y créeme, una vivienda que no considera estos factores desde el principio nunca será plenamente sostenible. Es como si quisieras tener un coche que consuma muy poco, pero estudiar la aerodinámica para que la resistencia al aire sea mínima no entra dentro de tus planes… siento decirte que algo que parte de las premisas equivocadas, acaba como dice la canción: malamente.
Vientos predominantes
Suele ser un condicionante que pasa más desapercibido que la orientación y el soleamiento. Sin embargo, es necesario prestar atención a los vientos que inciden en tu parcela. También a la temperatura y humedad que tienen habitualmente. Recuerda que tu vivienda será como esa taza de café que soplas para que se enfríe rápido; así que si no quieres perder energía calorífica cuando los vientos fríos soplan, tu arquitecto deberá tenerlo en cuenta durante el diseño. Del mismo modo, los vientos que habitualmente traigan lluvia son importantes a la hora de diseñar una protección adecuada ante la humedad.
Altura y materiales del entorno
Si hay edificios cercanos de una altura considerable, inevitablemente producirán sombra sobre tu parcela; y deben formar parte de los criterios a estudiar cuando sitúes tu vivienda. Por otro lado, deben estudiarse los materiales y colores que rodean el ámbito en el que vamos a construir.
En ocasiones será una parcela con amplias zonas verdes; pero puede darse el caso de que estemos en un entorno consolidado urbanísticamente y rodeado por amplias superficies asfaltadas, o bien muros colindantes de piedra u hormigón muy expuestos al sol. Sería un error no preveer que estas características pueden tener relevancia en el confort de tu casa.
También es cierto que no siempre se pueden atender todos los factores existentes, pero en todo caso debemos ser consicientes de ellos y actuar de manera informada.
2. Estudio y análisis de la arquitectura vernácula.
La construcción tradicional recoge la experiencia de muchos años, y a través de su análisis y del estudio de tipologías concretas (vivienda aislada, vivienda en hilera, bloque de viviendas…), se pueden sacar conclusiones de diseño muy útiles. También se pueden extraer soluciones constructivas específicas que habitualmente están refinadas por la economía de medios y el conocimiento del entorno en el que se sitúan.
La arquitectura vernácula es un referencia válida a la hora de definir qué materiales se encuentran de manera local. Así se contribuye a reducir la huella de carbono presente en la extracción, producción y transporte de materiales. Y de igual manera, los materiales suelen estar muy optimizados para la función que realizan.
Por ejemplo, la arquitectura tradicional japonesa está construida en su mayor parte en madera (un material flexible), y con uniones diseñadas para responder de manera adecuada ante terremotos. Esto no quiere decir que tenga que construirse todo en madera o imitar la estética tradicional; significa que es una referencia válida y un sistema constructivo probado a lo largo del tiempo que puede ser muy útil a la hora de afrontar nuevas intervenciones.
3. Diseño atemporal y versátil como base de tu casa sostenible
Para Datum, se trata de un aspecto fundamental. Ningún edificio es sostenible si su configuración general impide que vaya evolucionando y adaptándose a los cambios futuros, o bien es resultado únicamente de la moda de un determinado momento. Cualquier edificio que cae en desuso a los 25 años o deja de ser práctico y necesita ser sustituido por otro, será incapaz de amortizar el gasto energético y de recursos que se emplearon en su construcción. No importa la cantidad de tecnología, las fuentes de energías renovables, si en su momento alcanzó un certificado LEED Platinum o que lo construyeras en tierra compactada. No será un edificio sostenible.
Me gustaría aclarar que un diseño atemporal y versátil no significa sin personalidad o que no esté pensado para ti. El proyecto de tu casa debe responder a tus necesidades y tus aspiraciones futuras; y esto puede conseguirse a través de espacios capaces de evolucionar al mismo tiempo que tú lo haces.
Espacios ordenados y mobiliario funcional
Cuando los espacios en los que vives o trabajas son de proporciones adecuadas y tienen una secuencia ordenada y funcional entre ellos, es más fácil desarrollar tus actividades de una manera agradable y eficiente.
Además, contar con una distribución espacial versátil ayudará a que tu vivienda vaya adquiriendo el carácter que tú deseas y no al revés. Esto favorece el incremento de la vida útil de tu casa, porque te sentirás cómodo durante más tiempo y por tanto la sostenibilidad aumentará proporcionalmente.
Diseñar tu casa sostenible con una base racional y eficiente pensada para perdurar en el tiempo (estructura, muros, escaleras, etc); y de forma complementaria, un conjunto de elementos que responden a las necesidades de un momento concreto (algunos tabiques, mobiliario para dividir espacios, ciertas tecnologías, etc), favorece la adaptabilidad y la versatilidad de tu vivienda en el futuro.
Materialidad adecuada
Con el objetivo de extender lo máximo posible la vida de tu vivienda, los materiales responderán a tus preferencias y a la función que van a desarrollar. Es lógico que para los elementos permanentes se utilizen materiales más durables. Además los usaremos atendiendo a criterios de soleamiento, almacenamiento de calor, etc.
En función de si es una vivienda habitual o de vacaciones, llegaremos a criterios que permitan decidir si deben ser materiales de una densidad e inercia térmica alta como por ejemplo la piedra, el hormigón, el ladrillo… o si deben tener otro tipo de características como por ejemplo el acero, la madera… o combinaciones entre ellos.
4. Estrategias pasivas y activas en arquitectura sostenible
Envolvente térmica, inercia térmica y hermeticidad
La envolvente térmica debe ser del grosor adecuado y continua en su totalidad, evitando los puentes térmicos. Los puentes térmicos son zonas de las fachadas, cubiertas, etc. que por la manera en la que se construyen quedan sin aislar térmicamene. Por estas zonas se pierde mucha energía, así que hay que cuidar especialmente los encuentros entre elementos constructivos. De esta forma se evitan también patologías como condensaciones, que pueden derivar en humedades. Se recomienda utilizar aislamientos con un valor de transmisión no mayor al entorno de 0,3W/m2K para climas como el de España.
Otra de las claves de la envolvente térmica de tu edificio es prestar atención a cómo se resuelve el encuentro entre las partes opacas del cerramiento y los huecos. Si hay sistemas como persianas por el lado exterior de la ventana, mucho cuidado con cómo se construye la caja, ya que normalmente es una fuga de calor importante.
En cuanto a la hermeticidad, toda la envolvente debería estar coordinada con el aislamiento y controlada en su totalidad si asumimos un estándar exigente. Conseguir que no haya pérdidas energéticas puede lograr ahorros del 5%.
Elementos de sombra previstos y correctamente dimensionados
Diseñar para un correcto soleamiento implica necesariamente filtrar la energía que el edificio recibe por radiación solar. Como consecuencia, los elementos de sombra tanto integrados en el edificio como naturales, deben estar situados y dimensionados de manera adecuada.
En las partes de tu casa más susceptibles de recibir sol directamente durante muchas horas, se recomienda la incorporación de elementos integrados; porque son más eficaces y constantes para reducir de manera controlada las ganancias de calor en verano y permitirlas en invierno.
Dimensionar correctamente los elementos integrados es muy importante para el confort térmico, y atiende a aspectos como la altitud y latitud de tu parcela, la inclinación de los rayos del sol según la estación, etc.
Del mismo modo, la plantación de ciertas especies de árboles caducifolios con una densidad de ramaje adecuada pueden ser un elemento ideal si están colocados estratégicamente dentro de tu parcela, creando microclimas muy agradables en su entorno. También es un recurso efectivo el uso de pérgolas que puedan combinar especies de arbustos y plantas trepadoras, o patios con vegetación.
Posición y dimensionado de huecos
Pueden ser una gran fuente de captación de calor para el interior de tu vivienda sostenible si están bien diseñados, orientados y protegidos para evitar sobrecalentamientos en verano.
Para lograr ser más efectivos en la captación de calor, debemos almacenar esta energía calorífica que entra por las ventanas en elementos de alta inercia térmica.
Por ejemplo, muros o suelos colocados estratégicamente para almacenar el calor durante el día y liberarlo por la noche. Y también es muy importante que los niveles de iluminación natural estén entre los rangos óptimos para un buen confort.
Fuentes de energías renovables y tecnología al servicio de la sostenibilidad
No me dentendré mucho en este apartado, ya que la variedad de sistemas y tecnologías disponibles es amplísima. Obviamente, no sería coherente diseñar tu casa sostenible incorporando las reflexiones anteriores e instalar una caldera de la época victoriana alimentada por carbón.
Incluir sistemas de captación de energía y eficiencia energética para tu vivienda sostenible es importante; pero como trato de ilustrar, la idoneidad de un sistema u otro dependerá de cada caso.
Así mismo, influyen multitud de factores como el tamaño de la parcela, crucial en la geotermia; o el abastecimiento de combustible desde zonas cercanas, importante en calderas de biomasa, porque no parece muy sostenible tener este tipo de sistemas, pero que su suministro provenga de un lugar a 800km de distancia…
5. Comprobación y validación de las estrategias de eficiencia energética y confort propuestas para tu casa sostenible
Hoy en día, los técnicos especializados en arquitectura sostenible tenemos a nuestra disposición herramientas para validar las decisiones de diseño derivadas del análisis del entorno y las condiciones climáticas de la zona en que intervenimos.
Algunos de los precesos de verificación pueden incluir simulaciones, para asegurarnos de que las condiciones de iluminación natural, los sistemas de control de radiación solar, etc. están adecuadamente controladas de cara a contar con espacios confortables y saludables para tu vivienda sostenible.
Muy interesante
Muchas gracias!
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